El agua en Valencia, como en muchas otras zonas del Levante español, se caracteriza por tener una alta concentración de minerales, especialmente calcio y magnesio. Esta composición convierte al agua de la región en lo que se denomina “agua dura”, es decir, agua con alto contenido en cal. Aunque esta condición no representa un riesgo grave para la salud general, sí puede tener implicaciones concretas en la salud bucodental si no se toman medidas adecuadas.

¿Qué es la cal y por qué está presente en el agua?

La cal es el residuo que queda al evaporarse el agua dura. Técnicamente, se trata de carbonato cálcico y magnésico que se disuelve en el agua al filtrarse por terrenos calcáreos. En zonas como Valencia, donde el terreno es rico en este tipo de minerales, es común que el agua de grifo contenga una alta concentración de cal. Aunque no es perjudicial para beber, sí afecta a aparatos, tuberías… y también puede influir, de forma indirecta, en la salud oral.

Efectos de la cal en la salud bucodental

Aunque el agua con cal no es agresiva para los dientes de forma directa, su uso continuado puede favorecer ciertas condiciones que alteran la higiene y el equilibrio de la boca:

1. Abrasión del esmalte dental

En combinación con una higiene bucal inadecuada, el exceso de minerales puede provocar una ligera abrasión en la superficie dental. Este efecto no se produce por el agua en sí, sino por residuos que se acumulan con el tiempo y que pueden dificultar la limpieza adecuada.

2. Formación de sarro dental

La cal presente en el agua puede contribuir a que se forme más placa bacteriana que, si no se elimina correctamente con el cepillado diario, puede mineralizarse más rápidamente, dando lugar al sarro. Esta es una de las consecuencias más comunes y directas.

3. Obstrucción en irrigadores o cepillos eléctricos

Para quienes utilizan dispositivos eléctricos de higiene oral, como irrigadores bucales o cepillos sónicos, el agua con cal puede formar depósitos minerales que obstruyan o deterioren el aparato. Esto no afecta directamente a la boca, pero sí al rendimiento del dispositivo y, por tanto, a la calidad del cuidado dental.

Recomendaciones para contrarrestar los efectos del agua dura

En Clínica Dental Domenech, como expertos en salud bucodental en Valencia, recomendamos una serie de hábitos para prevenir cualquier consecuencia negativa derivada del uso de agua con cal:

Usar agua filtrada para el enjuague bucal o los irrigadores dentales. Un filtro antical doméstico puede marcar la diferencia.
Mantener una higiene dental rigurosa, con cepillado después de cada comida, uso diario de hilo dental y enjuague con colutorios con flúor.
Acudir periódicamente al dentista para realizar limpiezas profesionales y eliminar el sarro acumulado.
Controlar la dureza del agua en el hogar y revisar periódicamente los aparatos de higiene bucal.

Conclusión

La cal en el agua no es peligrosa para la salud bucodental, pero sí puede favorecer condiciones como la acumulación de sarro o dificultar la eficacia de los dispositivos de limpieza bucal. Si vives en Valencia o alrededores, es importante que mantengas una buena higiene dental, uses métodos preventivos y acudas a revisiones periódicas.

La cal del agua en Valencia y su impacto en la salud bucodental